¿Estás sentado cómodamente en este momento? OK, esperaré unos segundos para que puedas ajustar tu postura y podamos continuar con el texto. Por mucho que todos sepamos que nuestra espalda debe estar erguida, los hombros hacia atrás y los glúteos contra el respaldo de la silla, tan pronto como dejamos de prestar atención, tendemos a dejar que nuestro cuerpo se deslice por la silla hasta que nuestra columna tome la forma de un gran signo de interrogación. Esto puede conducir a diversos problemas de postura y circulación, dolor crónico y aumento de la fatiga después de un largo día, semana, mes o años de trabajo. Pero debes saber que no estás solo y que no es (necesariamente) tu culpa. ¿Qué elementos hacen que una silla sea cómoda? ¿Cómo pueden ayudarte a mantener una postura adecuada durante más tiempo? ¿Es posible tener diseño y comodidad en un mismo producto? En este artículo intentaremos responder a estas preguntas y mostrar algunos ejemplos del catálogo de Architonic.
La pandemia de Covid-19 reforzó una tendencia corporativa existente (pero no siempre utilizada), que consistía en que las empresas permitieran que sus empleados hicieran su trabajo desde casa. Aunque algunas personas ya tenían un espacio dedicado para trabajar en casa, con un buen escritorio y una silla, no era la norma para la mayoría de las personas. La gran mayoría tuvo que improvisar en la casa, sentados en la mesa de la sala, en el sofá o incluso en la cama. Lo que pensábamos que duraría 2 semanas, se prolongó durante casi 2 años y las quejas de dolor de espalda se hicieron más frecuentes que nunca. Los asientos adecuados afectan directamente la comodidad y la productividad, y gran parte de la humanidad pasa alrededor de un tercio del día sentados, en casa o en la oficina.
El objetivo de la ergonomía (el estudio del diseño de equipos y dispositivos que se adaptan al cuerpo humano y sus movimientos) es reducir el estrés y eliminar las lesiones y los trastornos asociados con el uso excesivo de los músculos, las malas posturas y los movimientos repetidos. Esto se puede aplicar a una variedad de objetos, desde herramientas de trabajo hasta una silla de oficina. Tan simple como puede parecer el diseño de una silla, hay una multitud de ángulos, dimensiones y ajustes menores que pueden marcar diferencias brutales en cuanto a la comodidad de su usuario. Es por eso que elegir la silla adecuada para trabajar en casa no es una tarea sencilla: debe satisfacer sus necesidades, no ser demasiado costosa y (al menos mínimamente) coincidir con el resto del espacio, lo que requiere mucha investigación. Para ser considerada una buena silla, debe cumplir unos sencillos requisitos:
- Ajustes: altura del asiento, inclinación del respaldo y soporte lumbar para adaptarse a diferentes tamaños y tipos de cuerpo. Esto permite al usuario personalizar la silla a su propio cuerpo y postura, reduciendo el riesgo de trastornos musculoesqueléticos y promoviendo la comodidad.
- Comodidad: generalmente dependiendo del material, el acolchado y los ajustes mencionados anteriormente.
- Durabilidad: pasamos mucho tiempo en estas sillas y por eso es importante que la inversión realizada valga la pena a lo largo del tiempo.
- Diseño: el diseño de la silla debe ser agradable a la vista y combinar con la estética de la habitación u oficina.
Basándonos en el catálogo de Architonic, hemos elegido algunas características que ejemplifican las configuraciones más personalizables de una silla. Por supuesto, cuanto más personalizable sea el artículo, más probable es que se adapte perfectamente a sus necesidades. No obstante, cuando no sea posible elegir la opción más completa, puedes optar por la configuración que más te interese:
Asientos: Ajustes de altura, profundidad e inclinación
Este es un aspecto importante de la comodidad y la ergonomía de la silla. Lo ideal es que la altura sea regulable, permitiendo al usuario apoyar los pies en el suelo; y la profundidad y el ancho deben ser adecuados para adaptarse a diferentes tipos de cuerpo. Otros factores importantes son el ángulo del asiento, que debe soportar la curva natural de la columna, así como las características del material y su nivel de acolchado, que influirán en la comodidad.
Respaldos: Ajustes de altura e inclinación
El respaldo brinda soporte para la región lumbar y promueve una buena postura para sentarse. Preferiblemente, sus dimensiones deben ser suficientes para el apoyo de hombros, cuello y espalda, con inclinación ajustable para apoyar mejor la curvatura natural de la columna.
Soporte lumbar: fijo o con ajustes de altura y profundidad
Esencial para reducir el dolor en la región lumbar. Esta debe ser firme, sin ser demasiado rígida o incómoda, así como ajustable (en ángulo y altura) para adaptarse a todo tipo de cuerpo. Este es uno de los aspectos más importantes de una silla para promover una buena postura durante largos períodos de tiempo.
Apoyo de brazos: Ajustes de altura, lateral, frontal e inclinación
Proporcionan un lugar para descansar los brazos, lo que ayuda a reducir la tensión en el cuello, los hombros y las muñecas, y hace que la silla sea más cómoda para sentarse durante largos períodos de tiempo.
Apoyo de cabeza: Fijo o ajustable
Un reposacabezas puede ser una característica interesante para quienes pasan mucho tiempo sentados y puede reducir la tensión en los hombros y el cuello. Idealmente, debe ser ajustable para adaptarse a diferentes alturas, así como estable y cómodo.
Por supuesto, es fundamental que los usuarios aprendan a ajustar sus propias sillas, así como los objetos que les rodean, para que su posición de trabajo sea lo más adecuada posible. También es importante tomar descansos regulares y estirarse, moverse y ajustar la postura y la posición con frecuencia. Sin duda, tomar conciencia de estos puntos marcará una gran diferencia en el futuro.
Revisa otras opciones de sillas de oficina en el catálogo de Architonic.